Limpieza Hepática

(Libro, Limpieza Hepática y de la Vesícula de Andreas Moritz)

Limpiar el hígado y la vesícula y remover los cálculos biliares es uno de los más importantes y poderosos eventos en la mejora de su salud.
La limpieza del hígado requiere de seis días de preparación, seguido de las entre 16 y 20 horas que dura la limpieza, propiamente hablando.

Para remover los cálculos biliares, necesitará los siguientes objetos:
– Jugo de manzana, seis recipientes de un litro (mejor si es orgánico)
– Sales de Epsom: 4 cucharadas soperas disueltas en tres vasos de agua
– Aceite de Oliva Virgen: Medio Vaso
– Pomelo o una combinación de limones y naranjas frescas. Suficientes para exprimir dos tercios de vaso de jugo.
– 1 Frascos de ½ litro con tapa para la mezcla de aceite y el zumo de pomelo o limón con naranja.

Preparación para la limpieza hepática

Tome un litro de jugo de manzana diariamente durante un período de seis días. (Puede tomar más jugo si le sienta bien).

El ácido málico en el jugo de manzana suaviza los cálculos biliares y facilita su paso por los conductos biliares. El jugo de manzana tiene un fuerte efecto limpiador.
Personas sensibles pueden sentir hinchazón y, ocasionalmente, diarrea, durante los primeros días. Gran parte de la diarrea será bilis estancada y desechada por el hígado y la vesícula (de fácil reconocimiento debido a su tonalidad café y amarilla).
El efecto fermentador del jugo ayuda a que los conductos biliares se expandan. Si esto se torna incómodo, puede agregar agua al jugo de manzana.
Beba el jugo lentamente durante todo el día, entre comidas (evite tomar el jugo durante, justo antes o hasta dos horas después de las comidas y por la noche).
Esto, además de su consumo diario de agua. Sería conveniente que se enjuagara la boca con bicarbonato de sodio o que se cepille los dientes varias veces durante el día, para que el ácido del jugo no dañe sus dientes.

Recomendaciones de dieta

Durante toda la semana de preparación y limpieza evite tomar alimentos o bebidas frías o congeladas; ya que enfrían al hígado y minimizan la efectividad de la limpieza.
Todas las comidas y bebidas deberán ser calientes o, por lo menos, estar a temperatura ambiente.
Para ayudar al hígado a prepararse para la descarga principal, trate de evitar comidas de origen animal, productos lácteos y comidas fritas. Aparte de esto, coma normalmente, pero evite comer de más.

La mejor hora para la limpieza
El segmento principal y final de la limpieza hepática se lleva a cabo durante un fin de semana, cuando usted no se encuentre bajo presión y tenga tiempo suficiente para descansar.
A pesar de que la limpieza es efectiva en cualquier momento del mes, de preferencia deberá coincidir con un día que se encuentre entre luna llena y luna nueva.
El periodo de 5-6 días antes de la limpieza puede comenzar 5-6 días antes de la luna llena.

Si toma algún medicamento
Durante la limpieza hepática evite tomar cualquier medicamento, vitaminas o suplementos que no sean absolutamente necesarios.

Asegúrese de limpiar su colon antes y después de cada limpieza hepática:
El tener evacuaciones con regularidad no significa que sus intestinos se encuentran libres de obstrucciones. La limpieza del colon, ya sea unos días antes o, idealmente, en el sexto día de preparación, ayuda a prevenir o minimizar cualquier incomodidad o nausea que pueda surgir durante la descarga hepática.
Previene el reflujo de la mezcla de aceites o productos de desecho del tracto intestinal. También asiste al cuerpo en la rápida eliminación de cálculos biliares.
La Terapia colónica (o hidroterapia del colon) es el método más sencillo y rápido para preparar al colon para una limpieza hepática.

Lo que necesita hacer al sexto día de tomar el jugo de manzana:
Si siente hambre por la mañana, coma un desayuno ligero, como cereal caliente; avena sería la opción ideal.
Evite el azúcar u otros edulcorantes, especias, leche, mantecas y mantequillas, aceites, yogurt, queso, jamón, huevos, nueces, pasteles, cereales fríos, etc. Puede consumir frutas y jugos de frutas.
Para el almuerzo, coma vegetales al vapor) y use un poco de sal no refinada de mar o de roca. Repitiendo, no coma comidas proteínicas, mantequillas o aceite, ya que puede sentirse mal durante la limpieza.
No coma o beba (salvo agua) después de las 2 PM, de lo contrario, ¡se arriesga a no arrojar ninguna piedra!
Siga exactamente los tiempos descritos a continuación para obtener el mayor beneficio de la descarga hepática.

El Proceso de Limpieza Hepática

NOCHE
6:00 pm: Agregue cuatro cucharadas soperas de Sales de Epsom (sulfato de magnesio) a tres vasos de agua filtrada en una jarra. Esto prepara cuatro porciones de ¾ de vaso cada una.
Tome su primera porción ahora. Puede tomar un par de tragos de agua después para deshacerse del sabor amargo en la boca o agregue un poco de limón para mejorar el sabor.
Algunas personas lo toman con un sorbete plástico para evitar las papilas gustativas de la lengua.
Es recomendable que se cepille sus dientes o que enjuague su boca con bicarbonato de sodio.
Una de las principales acciones de las Sales de Epsom es el dilatar (ensanchar) los conductos biliares, facilitando el paso de las piedras. También, limpia cualquier desecho que pudiera obstruir el paso de las piedras.

8:00 pm: Beba su segunda porción (3/4 de vaso) de Sales de Epsom.

9:30 pm: Si para esta hora, usted no ha evacuado y no realizó una limpieza del colon dentro de las pasadas 24 horas, aplíquese un enema de agua; esto desencadenará una serie de evacuaciones.

9:45 pm: Lave bien los pomelos (o limones y naranjas). Exprímalas con la mano y retire la pulpa. Necesitará ¾ de vaso de jugo. Vacíe el jugo y ½ vaso de aceite de oliva en el frasco. Cierre el frasco y agite fuertemente, aproximadamente 20 veces o hasta que la solución se vea acuosa o aguada.
Idealmente, usted debería tomarse esta mezcla a las 10:00 PM, pero si cree que necesita ir al baño un par de veces más, puede retrasarse hasta 10 minutos.
10:00 pm: Permanezca de pie al lado de su cama (no debe sentarse) y beba la mezcla, pura, de preferencia Si es necesario, tome un poco de miel entre tragos, para ayudar a tragar la mezcla. Sin embargo, la mayoría de la gente no tiene problema en tomar la mezcla pura. No se tarde más de cinco minutos para hacerlo.

¡ACUÉSTESE INMEDIATAMENTE! ¡Esto es esencial para ayudar a que los cálculos se suelten!
Apague las luces y acuéstese boca arriba con una o dos almohadas para levantarlo un poco. Su cabeza debe estar a una altura mayor a la del abdomen. Si esto es incómodo, acuéstese sobre su lado derecho, con las rodillas dobladas hacia su cabeza. ¡Permanezca en esta posición por lo menos durante 20 minutos y trate de no hablar!
Fije su atención en su hígado. Usted puede sentir las piedras moviéndose a través de los conductos biliares como si fueran canicas. No sentirá ningún dolor porque el magnesio de las Sales de Epsom mantiene los conductos biliares abiertos y relajados, y la bilis secretada junto con las piedras mantiene los conductos lubricados (lo cual es distinto a un ataque de dolor de la vesícula, donde el magnesio y la bilis no están presentes).
Si puede, trate de dormir. Si durante la noche siente la necesidad de evacuar, hágalo. Verifique si ya hay algunas pequeñas piedras (de color verde o café claro) flotando en el inodoro.
Puede sentir náuseas durante la noche y/o en las tempranas horas de la mañana. Esto se debe principalmente a un repentino y fuerte desecho de cálculos y toxinas del hígado y la vesícula, empujando la mezcla de aceite hacia el estómago. Las náuseas pasarán durante la mañana.

A LA MAÑANA SIGUIENTE
6:00-6:30 am: Al despertarse, pero no antes de las 6 de la mañana, beba su tercer vaso de sales de Epsom (si siente demasiada sed, beba un vaso de agua tibia o a temperatura ambiente antes de tomar las sales).
Descanse, lea o medite. Si se siente con sueño, regrese a la cama, pero es preferible que el cuerpo permanezca en posición vertical.
La mayoría de la gente se siente absolutamente bien y prefiere hacer ejercicios ligeros, como Yoga.

8:00-8:30 am: Beba su cuarto y último vaso de sales de Epsom.

10:00-10:30 am: Usted puede beber jugo fresco en este momento.
Media hora después, usted puede comer una o dos piezas de fruta fresca.
Una hora más tarde usted podrá ingerir alimentos regulares (pero solo ligeramente). Por la tarde o a la mañana siguiente, usted regresará a la normalidad, y comenzará a sentir las primeras señales de mejora. Continúe ingiriendo comidas ligeras durante los siguientes días. Recuerde, su hígado y vesícula acaban de pasar por una cirugía mayor, aunque sin los dañinos efectos secundarios.

Los Resultados Que Puede Esperar

Durante la mañana y, quizás, por la tarde después de la limpieza, usted tendrá un número de evacuaciones aguadas. Estas consisten inicialmente de cálculos mezclados con residuos de comida, y después, simplemente piedras mezcladas con agua. Las piedras serán de diferentes tonalidades de verde y las de color oscuro son las más antiguas, pueden ser de colores brillantes. Los cálculos vienen en todos tamaños, colores y formas.
Trate de hacer una estimación de la cantidad de piedras.
Esto ayuda a mejorar  los dolores de espalda, las alergias u otros problemas de salud, y para prevenir la aparición de otras enfermedades, usted necesitará remover todas las piedras. Esto puede requerir por lo menos seis limpiezas, las cuales pueden llevarse a cabo en periodos de dos o tres semanas, o mensualmente (no lo haga con mayor frecuencia que esto). Si usted no puede hacer las limpiezas con esta frecuencia, puede darse más tiempo entre limpiezas. Lo importante es que recuerde que una vez que haya comenzado a limpiar el hígado, debe continuar haciéndolo hasta que ya no salgan piedras. El dejar la limpieza a medias por un periodo prolongado de tiempo (tres o más meses) puede causar una mayor incomodidad que el no haber hecho la limpieza del todo.

¡Importante! ¡Por favor lea cuidadosamente!

La limpieza hepática es uno de los métodos más invaluables y efectivos para recuperar la salud. No hay riesgos involucrados si todas las instrucciones se siguen al pie de la letra.
Por favor tome la siguiente instrucción muy seriamente. Probablemente, algunos cálculos biliares, durante su proceso de expulsión, se alojen en el colon. Estas piedras pueden ser removidas con una Terapia colónica. Esto debería hacerse, idealmente, al segundo o tercer día de la limpieza hepática.
Si hay cálculos en el colon, estos pueden causar irritación, infección, dolores de cabeza y del estómago, problemas tiroideos, etc. Estas piedras pueden convertirse en una fuente de toxemia en el cuerpo. Si no hay hidroterapia del colón disponible en la región donde vive, puede aplicarse un enema de café, seguido de un enema de agua. Esto, sin embargo, no garantiza que todas las piedras hayan sido removidas.
No hay un substituto real de una irrigación colónica. Como sustituto mezcle una cucharada tetera al nivel de sales de Epsom con un vaso de agua tibia y bébalo a primera hora de la mañana del día que haya elegido para la limpieza del colon.